Acerca del Hotel
La Hacienda de Molinos es la posta obligada en la vuelta a los Valles Calchaquíes. La antigua casona del siglo XVIII, que fuera residencia del último gobernador de Salta por mandato del Rey, ha sido restaurada para brindar el confort de un hotel, manteniendo la esencia y rasgos de la época colonial. El patio del molle, los gruesos muros de adobe, las rejas de hierro y los techos, construidos con algarrobo y cañizo, son sólo algunos encantos del hotel, que imponen su carácter remontándonos al pasado. Molinos formó parte del Camino del Inca, fue testigo del encuentro de razas, de pueblos, de raíces y de sentidos. Hoy sus callecitas, iluminadas por faroles, acumulan en silencio parte de esa historia.